Si te estás planteando poner placas solares en casa o en tu negocio, seguro que ya te suenan los paneles. Pero, ¿has oído hablar del inversor solar? Piénsalo como el director de orquesta o, mejor aún, ¡el auténtico cerebro de tu instalación de autoconsumo! En este artículo, vamos a desmenuzar los diferentes tipos de inversores solares de forma clara, para que entiendas qué hace cada uno y cuál podría ser el fichaje estrella para ti.
¿Qué es un inversor solar y por qué es tan vital?
El inversor solar, que suele ser una caja más o menos discreta que se instala cerca de tu cuadro eléctrico, tiene una misión muy importante: transformar la corriente continua (CC) que recogen tus paneles del sol en la corriente alterna (CA) que necesitas para usar en tu día a día. ¡Magia!
También se encarga de:
- Exprimir cada rayo de sol: Se asegura de que tus paneles estén siempre trabajando a tope, en su punto de máxima eficiencia.
- Ser el chivato de tu instalación: Te da información valiosísima sobre cuánta energía estás produciendo, cuánta estás gastando en casa, y si algo no va como debería.
- Velar por la seguridad: Protege tu instalación y también la red eléctrica general ante posibles fallos o sobrecargas
¿Qué tipos de inversores solares hay?
No todos los inversores son cortados por el mismo patrón. Dependiendo de cómo sea tu tejado, de si quieres poner baterías ahora o más adelante, o de cuánto control quieras tener sobre tu producción, te encajará mejor un tipo u otro. ¡Vamos a conocer a los principales candidatos!
Inversores de cadena (o String Inverters)
Estos son, con diferencia, los que más se ven por ahí, sobre todo en instalaciones de autoconsumo en viviendas donde el tejado no tiene muchas complicaciones.
¿Cómo funcionan? Los paneles solares se conectan uno detrás de otro, en serie, formando “cadenas”. Todas estas cadenas de paneles se enchufan a un único inversor, que es el que se encarga de convertir la electricidad de todos los paneles a la vez.
- Sus puntos fuertes:
- Amigo del bolsillo: Suelen ser la opción más económica si hablamos de la inversión inicial por cada vatio que instalas, sobre todo si tu tejado es sencillo y no tienes sombras.
- Eficiencia notable: Los modelos actuales son muy eficientes convirtiendo la energía.
- Mantenimiento más directo: Al tener un solo “cerebro” principal, si hay algún problema, encontrarlo y solucionarlo puede ser más sencillo. El mantenimiento del autoconsumo solar en este aspecto puede ser más ágil.
- Tecnología probada: Llevan muchos años en el mercado y son muy fiables.
- Sus “peros”:
- Sensibles a las sombras y diferencias: ¡Este es su punto débil! Como los paneles van en cadena, si un solo panel de esa cadena produce menos, puede bajar el rendimiento de toda la cadena. Sí, como esas luces de Navidad que si una se fundía, te dejaba a oscuras media ristra.
- Menos flexibles para tejados “rebeldes”: Lo ideal es que todos los paneles de una misma cadena miren al mismo sitio y tengan la misma inclinación. Si tu tejado es un puzle con varias aguas o inclinaciones, puede que no le saques todo el partido.
- Monitorización general: Normalmente, ves la producción de toda la instalación o, como mucho, de cada cadena, pero no de cada panelito por separado.
- ¿Cuándo te puede encajar un inversor de cadena?
- Si tu tejado es una maravilla: uniforme, bien orientado y sin sombras traicioneras a las horas de sol.
- Si buscas la opción más ajustada de precio para una instalación estándar.
- Para instalaciones de cierto tamaño donde tener un solo inversor central simplifica las cosas.
Si estás en la fase de croquis de tu sistema, nuestra guía de instalación de autoconsumo solar te puede dar una buena hoja de ruta de todos los componentes que necesitas.
Microinversores: un pequeño cerebro para cada panel
Con los microinversores, la película cambia por completo. En lugar de un gran inversor para todos, ¡cada panel solar lleva su propio mini-inversor instalado justo debajo!
¿Cómo funcionan? Cada microinversor coge la corriente continua (CC) de su panel y la convierte directamente en corriente alterna (CA) allí mismo, en el tejado. Luego, toda esa corriente alterna ya lista para usar se junta y baja a tu cuadro eléctrico.
- Sus ventajas molonas:
- Cada panel a su bola, ¡y a tope!: Como cada panel tiene su propio “entrenador personal” , si a uno le da una sombra, se ensucia o tiene un mal día, no arrastra a los demás.
- La solución ideal para tejados con “personalidad” y sombras: Si tu tejado mira a varios sitios, tiene diferentes inclinaciones o sombras, los microinversores son tus mejores aliados.
- Control total, panel por panel: Puedes ver exactamente cuánta energía está produciendo cada una de tus placas solares.
- Crece a tu ritmo: Puedes empezar con unos pocos paneles e ir añadiendo más en el futuro sin complicaciones, cada uno con su microinversor. También te da más flexibilidad si alguna vez tienes que combinar paneles de diferentes características.
- Un plus de seguridad: Al convertir la electricidad a corriente alterna directamente en el tejado, los cables que bajan hacia tu casa llevan voltajes de corriente continua más bajos, lo que es un punto a favor en seguridad.
- Sus “contras”:
- La inversión inicial: Tener muchos cerebritos pequeños en lugar de uno grande suele implicar un desembolso inicial mayor. Esto influirá en el precio del autoconsumo solar global.
- Mantenimiento: Si un microinversor decide jubilarse antes de tiempo, hay que subir al tejado y acceder a ese panel en concreto para cambiarlo. Puede ser más engorroso que cambiar un inversor de cadena que tienes cómodamente en la pared.
- Más expuestos a la intemperie: Al estar en el tejado, los microinversores se enfrentan a más calor, frío y humedad, aunque están diseñados para aguantar.
- ¿Cuándo elegir microinversores?
- Si las sombras parciales son el pan de cada día en tu tejado.
- Si tu cubierta tiene varias orientaciones o inclinaciones. ¡Un auténtico desafío!
- Si eres un fanático del control y quieres una monitorización detallada de cada panel.
- Si piensas en ampliar tu sistema solar poco a poco en el futuro.
- Si la idea de tener menores voltajes de CC recorriendo tu tejado te da más tranquilidad.
Inversores híbridos: preparados para hoy, listos para mañana
Un inversor híbrido es, básicamente, un inversor (normalmente de tipo cadena) que viene con una función estrella bajo el brazo: puede gestionar de forma inteligente la carga y descarga de baterías de almacenamiento solar.
¿Cómo lo hacen? Además de convertir la corriente continua (CC) de tus paneles en corriente alterna (CA) para tu casa, son capaces de desviar el excedente de energía solar que no usas en el momento para cargar un banco de baterías. Y, cuando el sol se va a dormir, pueden coger esa energía guardada en las baterías y convertirla en CA para que la sigas usando.
- Sus grandes bazas:
- Gestión de baterías “todo en uno”: Si tienes clarísimo que quieres instalar baterías desde el minuto cero, o si es un plan a muy corto plazo, un híbrido te lo pone fácil. Simplifica la instalación y la gestión.
- Más autoconsumo, más independencia: Almacenar la energía que te sobra para usarla cuando no hay sol te permite chupar menos de la red eléctrica y, por tanto, ahorrar más con el autoconsumo solar.
- Función “salvavidas”: Ciertos inversores híbridos pueden darte energía de respaldo si hay un apagón en la red. Usarían la energía de las baterías para alimentar algunos circuitos esenciales de tu casa.
- Monitorización de nivel pro: Suelen venir con sistemas de monitorización muy completos para que veas en tiempo real qué pasa con la energía de tus paneles, tus baterías, lo que consumes en casa y lo que coges o viertes a la red.
- Sus “pequeños inconvenientes”:
- El precio es más elevado: Llevan más tecnología dentro, así que suelen ser más caros que los inversores de cadena que solo se dedican a convertir la energía solar directa.
- ¿Y si no pongo baterías pronto?: Si no tienes en mente instalar baterías a corto o medio plazo, quizás estés pagando un extra por una función que no vas a usar de momento. En ese caso, un inversor “solar normal” (no híbrido) podría ser suficiente.
- ¿Cuándo te debería cuadrar un inversor híbrido?
- Si vas a instalar baterías de almacenamiento solar junto con tus paneles, o si es un plan inminente.
- Si tu objetivo es exprimir al máximo tu autoconsumo y depender lo mínimo posible de la compañía eléctrica.
- Si te interesa mucho la idea de tener energía de respaldo en caso de apagones.
- Si te planteas solicitar subvenciones para autoconsumo solar, ya que algunos sistemas con baterías pueden tener ayudas específicas.
Un momento… ¿y los optimizadores de potencia?
Los optimizadores de potencia no son exactamente un tipo de inversor, sino unos aparatitos muy listos que se instalan en cada panel solar cuando se usa un inversor de cadena tradicional. Podríamos decir que son una solución intermedia, como un “apaño inteligente” para mejorar los sistemas de cadena.
¿Cómo funcionan estos cacharritos? Cada optimizador se encarga de que el panel al que está conectado trabaje siempre en su punto de máxima potencia, sin importar lo que estén haciendo los otros paneles de la misma cadena. Luego, envían esa energía ya “optimizada” al inversor de cadena central, que es el que finalmente la convierte a corriente alterna.
- Sus ventajas:
- Combaten las sombras y diferencias entre paneles: De forma parecida a los microinversores, si un panel con optimizador rinde menos por una sombra o cualquier otro motivo, no “hunde” tanto al resto de la cadena. ¡Mejoran el rendimiento general cuando las condiciones no son perfectas!
- Monitorización panel a panel: Muchos sistemas con optimizadores te dejan ver la producción de cada panel individualmente. ¡Más control!
- Más flexibilidad diseñando: Permiten un poco más de juego con diferentes orientaciones e inclinaciones dentro de una misma cadena que un sistema de string sin ellos.
- Coste intermedio: Suelen ser más caros que un sistema de string simple, pero a menudo más económicos que una instalación completa con microinversores.
- Sus “peros”:
- Más cacharros en el tejado: Tienes el inversor central en la pared y, además, un optimizador por cada panel arriba.
- El inversor de cadena sigue siendo el “cuello de botella” final: Aunque los optimizadores ayudan a que cada panel dé lo mejor de sí, la conversión final a corriente alterna depende del inversor central. Si este falla, todo el sistema se para.
- ¿Cuándo te pueden venir de perlas los optimizadores?
- Si tienes sombras parciales o algunas diferencias de orientación o inclinación en tu tejado, pero la inversión en microinversores se te va de presupuesto.
- Si quieres tener monitorización a nivel de panel pero prefieres la arquitectura de un inversor de cadena.
Claves para elegir el inversor solar
¡Menudo lío de opciones, eh! Para que no te pierdas en el laberinto, aquí te dejamos algunos puntos clave que te ayudarán a decidir cuál es el “cerebro” perfecto para tu instalación:
- Tu tejado manda: ¿Es una superficie lisa, bien orientada y sin sombras? Un inversor de cadena puede ser tu mejor y más económica opción. ¿Tu tejado es más bien un puzle con varias aguas, chimeneas y sombras juguetonas? Entonces los microinversores o los optimizadores de potencia seguramente te darán más alegrías.
- El presupuesto: Los inversores de cadena suelen ser los más amables con tu cartera al principio. Los microinversores y los híbridos implican una inversión inicial mayor.
- ¿Baterías?: Si tienes o vas a poner baterías, un inversor híbrido te facilitará mucho las cosas. Si no lo tienes claro, puedes empezar con un inversor normal y, si llega el día, explorar soluciones de acoplamiento AC para añadir baterías.
- El detective de la energía: Si te encanta tenerlo todo bajo control y saber exactamente qué está haciendo cada uno de tus paneles, los microinversores o los sistemas con optimizadores te van a flipar con su monitorización individual.
- El tamaño sí importa: Para instalaciones muy pequeñitas, la diferencia de precio entre las distintas opciones de inversor puede no ser tan abismal. Para instalaciones grandes, el coste por vatio de un inversor de cadena puede ser más atractivo si las condiciones del tejado son buenas.
- Garantías y marca: No te la juegues con marcas desconocidas. Elige inversores de mejores marcas de autoconsumo solar que tengan buena reputación y te ofrezcan garantías sólidas (lo normal es de 5 a 10 años, y a veces se pueden ampliar).
- El servicio técnico: Asegúrate de que la marca que elijas tenga un buen servicio técnico en tu zona. Por si las moscas.
- Piensa a largo plazo: No te fijes solo en el precio inicial. A veces, una inversión un poco mayor en un sistema más eficiente o flexible puede ahorrarte más dinero y dolores de cabeza con el tiempo. Evitar una mala elección aquí es clave para no caer en errores comunes del autoconsumo solar.
Tener claros estos conceptos te ayudará un montón a la hora de entender las propuestas y cómo contratar tu instalación de autoconsumo solar con más seguridad.
Preguntas frecuentes sobre tipos de inversores solares
¿Qué es más eficiente al final del día, un inversor de cadena o los microinversores?
▲Si hablamos de la eficiencia del aparato en sí, los inversores de cadena modernos de buena calidad son muy eficientes. La "magia" de los microinversores (o de los optimizadores) está en que pueden conseguir una mayor producción de energía de todo el sistema solar cuando las condiciones no son perfectas.
¿Puedo poner un inversor de cadena normal y, si luego veo que tengo sombras, añadirle optimizadores?
▼Generalmente, no es tan sencillo. Los optimizadores de potencia suelen ser parte de un sistema que está diseñado para funcionar con ellos desde el principio, y necesitan un inversor de cadena que sea compatible con esa tecnología específica de optimización. No son como un accesorio universal que puedas añadir a cualquier inversor de cadena que ya tengas instalado, a menos que ese inversor ya estuviera preparado de fábrica para esa posibilidad. Lo ideal es pensarlo bien desde el inicio de la instalación.
Si me decido por un inversor híbrido, ¿tengo que poner las baterías desde el primer día?
▼No, no estás obligado. Muchos inversores híbridos pueden funcionar perfectamente sin baterías al principio, comportándose como un inversor de red normal. La gran ventaja es que ya tienes el equipo "listo para baterías" , preparado para cuando decidas dar el paso e instalar el sistema de almacenamiento.
¿Cuánto tiempo se supone que dura un inversor solar?
▼La vida útil esperada de un inversor solar suele moverse entre los 10 y los 15 años, aunque algunos modelos de más calidad pueden aguantar más. Las garantías que te dan los fabricantes suelen cubrir entre 5 y 10 años, y en muchos casos te ofrecen la opción de ampliarla pagando un extra. De todos los componentes de tu sistema solar, el inversor es el que tiene más papeletas para necesitar un reemplazo antes que los paneles.